Carlos M.Polo Rubio
Profesor de Música
I.E.S. "Corona de Aragón" de Zaragoza
Desgraciadamente no se conoce ningún escrito musical que permita reconstruir la música del Antiguo Egipto, pero todo hace suponer que la música tenía un papel importante en la vida del egipcio, como nos demuestran las numerosas manifestaciones encontradas en las tumbas, tanto decoraciones pictóricas como ofrendas fúnebres. Mediante el estudio de estas muestras arqueológicas se ha llegado a las siguientes conclusiones:
Instrumentos:
Cordófonos:
Gran arpa de arco. Tenía de 6 a 8 cuerdas, un resonador ancho generalmente decorado con ojos de dioses como amuletos y se apoyaba en el suelo para ser tocada, normalmente acompañando a otros intérpretes.
b) Aerófonos:
- b.1. Flauta vertical. Construida en bambú, con una longitud en torno a los 110 cm., de 4 a 6 orificios y con boquilla en bisel.
- b.2. Chirimia doble. La constituían dos tubos de igual longitud, uno para cada mano, pero estas se entrecruzaban.
- b.3. Trompeta. Instrumento de uso funerario.
c) Membranófonos:
- c.1. Timbales de mano
- c.2. Tambores
d) Idiófonos:
- d.1. Sistros o sonajeros de Isis, empleados en el culto a esta diosa.
- d.2. Sonajeros.
- d.3. Varillas entrechocadas
Intérpretes:
Conocemos la existencia de músicos profesionales ya en el tercer milenio a. C., como el cantor y flautista de la corte Khufu-Anch.
También se conoce la existencia de lo que podríamos asemejar a los directores de orquesta actuales, es decir, músicos encargados de, a través de signos con las manos o brazos, coordinar a otros cantantes e instrumentistas.
Sistema tonal:
Estudiando instrumentos musicales como arpas o flautas y mediante el análisis de su número de cuerdas o posición de orificios se ha llegado a la conclusión de que la música del Antiguo Egipto estaba basada en un sistema pentatónico o heptatónico.
Se sumaron instrumentos nuevos, sobre todo la lira de la región de Asia menor y nuevas variedades de tambores (rodeados de un sistema de tensores de cuerda, como los tambores tubulares africanos). Al más antiguo sistro de Iba, en forma de herradura, se le sumó entonces el sistro de Naos, con silueta de templo estilizado.
Ya durante el Imperio Medio, el arpa había desarrollado nuevas formas, las que luego aparecieron en reproducciones del Imperio Nuevo. Entre ellas se encuentra el arpa de pié, de abundantes cuerdas (de 8 a 16, normalmente de 10 a 12), caja de resonancia curvada con ornamentación de hojas, y la más pequeña arpa de hombro, en forma de barca, con 3 a 5 cuerdas, siendo ambas tañidas, en general, por manos femeninas.
Más pequeñas aún eran las posteriores arpas de mano, en forma de hoz, que también se apoyaban sobre mesas o soportes (arpas de cantores). Por otra parte, había arpas gigantes, curvadas y cuya altura equiparaba a la de un hombre, especialmente en tiempos de Ramses III, cuya ejecución se hallaba a cargo de sacerdotes. A élla se sumó, desde Asia menor, la más pequeña arpa de ángulo y nuevas formas de liras. Entonces también se importó el laúd. Este instrumento apareció en Egipto en tres formas: como laúd de cuello largo, como tipo de rebab, y con forma aguitarrada.
Como instrumentos de viento existe la novedad de los oboes dobles y, en materia de instrumentos de percusión, los tambores de mano de formas nuevas y los platillos.
La medición de las distancias entre los trastes de los laudes, así como entre los orificios de digitación de los nuevos oboes, demuestra que las distancias entre los sonidos se tornan más estrechas. Aquí se desarrollo el sistema de grados semitonales de la Antigüedad tardía.
Se han conservado poesías amatorias y el texto de un himno al Sol de la época de Amenofis IV (Akenaton).
En esta época y en la época de los tolomeos llegan también al Egipto los instrumentos conocidos en el ámbito del Mediterráneo y el Asia menor. Son nuevos los grandes tambores, los tambores de vasija a la manera de las actuales darabukas árabes y los platillos de pinzas, además de algunos instrumentos de viento.
Cuando más intensamente se veía inundado al país por instrumentos, músicos, y pensamiento musical extranjeros, tanto más fuertes pueden advertirse las tendencias restauradoras. A la música antigua se la consideraba de elevado ethos, y constituía un importante factor educacional. A este tradicionalismo egipcio se refieren los escritores griegos clásicos como Heródoto y Platón en su pensamiento musical.
Del período helenístico proviene el primer órgano, el hydraulis, de Ktesibios de Alejandría (siglo III a.C.) y uno de los monumentos de música escrita cristiana más primitivos, el himno de Oxirincos (siglo III a.C.).
De izquierda a derecha y de arriba abajo: Arpa de arco del Antiguo Imperio, Arpa de hombro, arpa de pie del Imperio Nuevo, Timbal, Tambor, Sistro de Iba, Sistro de Naos, Flauta Vertical, Chirimia doble. |
Pintura al fresco procedente de la tumba de Djeser-Kere-Somb, en Tebas. De izquierda a derecha: Lira, Chirimía Doble, Crótalos, Cítara y Arpa de Pie. |
Estela egipcia en la que un músico interpreta ante Amón. Cantante acompañándose del arpa. |
Pintura procedente de la tumba de Nakht (XVIII dinastía), en Tebas. Chirimía dible, cítara y arpa de pie. |
ULRICH MICHELS. "Atlas de Música", vol. I. Alianza Editorial.
"Civilizaciones Antiguas". CD-ROM. Microsoft Home.
Una amplia bibliografia en varios idiomas se puede consultar en
http://www.british-museum.ac.uk/favor.html En esta página se pude observar:
Arpa de madera terminada en una caja de resonancia decorada
con una cabeza real.
Mujeres acompañandose con diversos instrumentos.
Figura de madera pintada del dios Bes bailando, acompañandose
con una pandereta.